A quién le vamos a decir de nuestro drama secreto?

El que nos persigue todo el tiempo...

A quién le vamos a gritar sin soñar que es un día mas?

Que mañana al despertar ya no existire y ayer aún no existía...

¿Y de quién será ese silencio?

¿Qué nos espera al otro lado del sueño?



Palabras liquidas

Nada como el océano


Solo el amor puede aniquilar a un demonio.....


martes, 23 de septiembre de 2008

Parte I. Nacimiento

¡Ah, si! Descanso amigos mios, no me da vergüenza escucharlos desde acá, las historias antiguas son muy conocidas para mi, aunque a veces yo no entiendo que fue lo que hicimos antes.
Si, te hablo a ti, te escucho con una fuerza que no puedes imaginar y todas las palabras me esperan para escribirte; te encuentro en mi imaginación como un fantasma hablando solo.
¿Me he preguntado tantas veces si los fantasmas existen?

Si, lo acepto, me gusta escaparme de vez en cuando a valles morados y si tengo que tomar una motocicleta para parecerme a tu padre con gusto lo haré, aunque a veces no comprendo por qué nos pasa esto, así me haces sonreir...

Y recuerdo en un instante de donde vine, un laberinto lleno de niños culpables, ahora se por qué y no me importa que la ignorancia me abandone poco a poco, nunca podré odiarte...
Eso de que siempre sonries me pone un poco nerviosa ¡No sé si quieres acariciarme o besarme!.

La locura me invade al sentir como cada poro de mi cuerpo te llama, me lo contaron al principio. Alguién habló de una promesa perdida en el tiempo, wow, es sorprendente como de pronto nuestros mundos se hacen uno...
Eso de las cadenas me asusta un poco, no me deja recordar con claridad, tú no estás aquí en mi cama ¡Me sorprendo a mi misma hablando conmigo!

Así de cerca estuviste de atraparme...

Creo que escucho mas allá de las palabras del viento y recuerdo esa vez que me quedé atrapada en un sueño. Despacio caminé por veredas solitarias, allá en dónde no llega la luz del sol, en dónde sola puedo sentir lo que sea. Y por un momento me odias por alejarme de ti, porque puedo irme si así lo quiero. ¡Ups! Que mentira tan grande esta de la muerte, claro que "uno siempre querrá olvidarse de la realidad". El triste, el desnudo de antes, tan deseoso de que alguien lo mire de frente, esperando el momento de romperse en la luz amarilla que lo rodea...
Ahí estaba él cuando de pronto un espejo tan grande como su cuerpo se le puso en frente y al mirarse juntos encontraron a una mujer.
Era ella, tan terrible y bella, la mujer hermosa que imagina mundos a espaldas del mundo sin temer no tener compañia, ella que siempre lo sabe todo y que siempre regresa al mundo para contar historias...

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